¡Buenas Gamers! Mucha gente lo vio simplemente como algo popular, y una gran parte del trabajo fue explicarle lo revolucionario que es este juego, es por ello que tiene un lugar en este museo. Según Jacob McMurray, curador del proyecto, en MoPop, intentan mostrar exhibiciones que exploran diferentes territorios sobre la cultura popular nerd. Principalmente, lo primero que querían decir con este proyecto es que Minecraft es más que un videojuego, es una plataforma de expresión creativa, incluso podríamos decir que es un medio, como la arcilla, la pintura, o la música. La siguiente gran idea que querían transmitir era la profundidad y la anchura de las cosas que la gente crea en Minecraft. Para Kwapi, el productor de compromiso público del museo, esta exhibición es una de las más emocionantes de todas en las que ha participado, ya que, al pasearse por ahí, puede ver como Minecraft está siendo usado con fines activistas. Por niños que quieren hablar activismo, que quieren encontrar cosas con las que puedan dejar huella en el mundo a la vez que disfrutan de ellas; es un lenguaje para ellos. Para otros, es un lugar donde pueden crear, ser artistas, ser un Picasso, un Van Gogh, donde crean piezas de arte que son un lenguaje para todo el mundo, cada uno con su particular jerga, con su propia cadencia, y eso es lo que hace que esta exhibición sea tan única, ya que intenta acceder a todos esas formas diferentes de conectar a la gente, de que se comuniquen entre ellos, así que intentan comunicarse utilizando Minecraft como su medio favorito. Cuando utilizaron las texturas, los objetos de Minecraft y los crearon a tamaño real, todo se volvió algo caótico, así que tuvieron que dar un paso hacia atrás para que la gente se centrase en aspectos clave del juego en los que pudiesen centrarse mejor. Al conseguirlo, resultó ser una de las mayores sorpresas para el museo. En el modo supervivencia de Minecraft, empiezas dando puñetazos a los árboles para conseguir madera. Todo comenzó como una broma, en plan; “tendríamos que hacer un árbol interactivo donde podamos darle puñetazos”, algo que pareció una idea terrible en aquel momento porque la gente podría resultar herida, y no querían que eso sucediese. Sin embargo, la gente intentó desarrollar esta idea, y al final pusieron una almohadilla con un sensor para que, al darle puñetazos, la pantalla mostrase la madera resultante, ¡así que al final dio resultado! La gente siempre presenta todo tipo de buenas ideas, como la de crear una mesa de trabajo, algo que Brad Purkey, el jefe de productos interactivos, dijo que podría funcionar hacer en la exhibición. Pensaron que eso sería algo mágico, y acabaron haciéndola para que la gente pudiese crear 33 tipos de objetos diferentes. Rosie Alyea, diseñadora gráfica del proyecto, dice que siempre hay limitaciones cuando creas algo en una galería, especialmente en un lugar donde la gente va a interactuar con las cosas de forma consistente. Entonces tienes que pensar en aspectos materiales, ¿cómo construimos esto?, ¿lo hacemos de una forma en que sea algo duradero? ¿para gente de todas las edades? Lo que seguro que no querían es que diese una sensación de que era una pieza de galería, querían que la gente entrase a este lugar y se sintiesen como si estuviesen dentro del juego. Para Martin Christoffel, el diseñador de la exhibición, las decisiones sobre materiales fueron un tema importante; ¿serían las piedras reales? ¿Y los esqueletos? Quizá éstos últimos no, pero tendrían que parecer hechos con huesos. Hicieron un gran esfuerzo para que los materiales que se usan en el juego, estuviesen de alguna manera presentes en la exhibición, listos para los asistentes, desde un punto de vista de práctico en el diseño. La gran mayoría de las exposiciones suelen ser transitorias, y cuando se presenta una oportunidad de algo que puede ser más a o menos permanente, es realmente divertido participar en ello, dice Martin. Cuando entramos a la exhibición, hay una gran pantalla con varios mundos diferentes que la gente ha construido, y esto es lo que más le gusta a Kwapi. Ver como crean estas magníficas obras de arte y cobran vida mediante un time-lapse, es algo realmente sorprendente. Además, se muestra curioso sobre si en 100 o 200 años estaremos colgando esas obras de arte en museos. Algo fundamental que buscan con este espacio, es que la gente que sabe de Minecraft, enseñe a aquellos que lo desconozcan, pero estas personas sin conocimientos del juego están siendo arrastrados por lo que ven, por lo que están haciendo, así que ahora ellos también tienen una oportunidad de explicarles a los demás de qué trata este videojuego, en especial los niños, que tienen esta oportunidad especial de mostrarse expertos en frente de un adulto, algo que nunca sucede. Pueden decirles, mira, esto es un portal hacia Nether, y esa serie de cosas. Por lo tanto, ocurren constantemente una serie de interacciones que hacen que el equipo esté realmente contento con este proyecto. Ver a la gente construir algo de manera conjunta a diferentes horas del día, hizo que Kwapi se diese cuenta de que hay algo que nos falta en este mundo que hemos construido, ya que personas con diferentes contextos, puede fusionarse para crear algo en función de una idea, de un concepto, y construir algo juntos. Cuando haces una exhibición, y trabajas con papel y lápiz y con ordenadores, piensas en pintar colores, cosas muy específicas, y puedes perder la razón de lo que estabas haciendo, cual es la idea central de todo esto, que son los visitantes. Así que a veces al ver a la gente en la galería, es cuando se dan cuenta de por qué hicieron todo esto, para que puedan aprender y divertirse, y esto motiva al equipo detrás de este proyecto. ¿Te ha gustado este video-artículo? Apóyanos dejándonos un comentario y compartiéndolo con tus amig@s.
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D_The_ProducerCon el vicio en el ADN, "D" no puede quitarle ojo a los videojuegos. Archivo
Julio 2020
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